El acrílico es un material duradero y de bajo mantenimiento que se puede personalizar en muchos colores y formas para adaptarse a la decoración del baño de casi cualquier hogar. También es muy fácil de limpiar y mantener, por lo que es una opción ideal para una bañera nueva o de reemplazo.
Tinas de acrílico se moldean a partir de moldes, lo que da como resultado una variedad de formas, tamaños y diseños. Vienen en opciones de esquina y modelos independientes que le dan a su baño un tema sofisticado.
La superficie de una bañera acrílica no es porosa y es lisa, lo que la hace más fácil de mantener limpia. También es resistente a las astillas y grietas.
Sin embargo, es sensible a los productos químicos de limpieza y algunos limpiadores abrasivos pueden ser dañinos. Puede evitar manchas y daños utilizando limpiadores no abrasivos, como agua y jabón o vinagre y agua en partes iguales.
Ocasionalmente, pueden aparecer rayones en la superficie de la bañera acrílica a medida que se desgasta con el tiempo. Estos deben repararse inmediatamente para evitar daños permanentes y evitar la formación de óxido o moho.
Los rayones se pueden reparar lijando con papel de lija fino y luego puliendo el área para restaurar el brillo y mejorar la resistencia a los rayones. Un poco de jugo de limón o bicarbonato de sodio mezclado con un poco de agua también puede ayudar a eliminar la suciedad y la suciedad.
La superficie acrílica también es propensa a las manchas, pero es menos probable que se decoloren o se astillen tan rápido con la limpieza y el mantenimiento adecuados. También puede usar una cera para automóviles para conservar el brillo y proteger la bañera contra la decoloración y los rayones.